Sin siquiera esperar, llegaste y te adueñaste de mi corazón. Ni siquiera imaginaba lo mucho que te querría … Viniste suavemente, y con todo tu cariño haciéndome delirar.
Lástima que llegó en el momento equivocado, sin cita previa y sin licencia logró convencerme. Confundió mi cabeza y mi corazón.
¿Y ahora? ¿Qué hago si no puedo amarte? Lo tengo solo en mis pensamientos y en hermosos sueños que me hacen flotar. Pero son solo sueños, muy difíciles de materializar.
Sueños que quedarán para siempre en el recuerdo de tu mirada. ¡Una mirada dulce y seductora, una mirada que permanece, que marca para toda la vida!
A veces me encuentro pensando, ¿cómo puedo mantener dos corazones en un corazón? La vida es realmente asombrosa, nunca sabemos qué esperar.
Pero debemos seguir nuestros caminos y nuestra felicidad para buscar, conquistar todos nuestros sueños y ¡¿quién sabe un día volver a encontrarnos ?!
Te deseo toda la felicidad del mundo y que todos tus sueños se hagan realidad.